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lunes, 31 de agosto de 2015

LAS ACTIVIDADES DEL VERANO



Segundo Fidel Maldonado Tapia

La llegada del verano en la sierra y oriente ecuatorianos, es tiempo de ocio y esparcimiento, porque coincide con la planificación estatal del periodo anual de instrucción de la niñez y juventud, lapso con el que también los padres de familia tratan de converger en sus trabajos, para poder dedicar y compartir unas horas o días con sus hogares.

Así se planifican y organizan diversas actividades, especialmente lúdicas para que los chicos repongan intereses, den un breve descanso a la actividad intelectual de su formación, se fortalezcan los lazos de la integración familiar, los viajes cortos o largos a determinados sitios, la estancia en la casa de los ancestros, en fin.

En el ámbito cultural de Loja, este lapso también tiene espacios destacados, las instituciones se preocupan de ofrecer actividades alternativas para el descanso, la expresión artística, y en lo general, la máxima manifestación de religiosidad con la peregrinación que hacen cientos de miles de lojanos, ecuatorianos y de los países vecinos, llevando en hombros a la imagen de la Virgen María en su advocación de El Cisne, con recorrido pedestre desde la parroquia de El Cisne hacia la ciudad de Loja,  en la que no se puede dejar de lado, que también en ese marco, no sólo participan devotos sino también personas, cristianos, que se suman a esta actividad.

En este año 2015, tenemos que se ha anticipado los días de la tradicional feria de Loja, instituida por Simón Bolívar en 1829, para con las exenciones tributarias paliar la pobreza y estado emergente en que quedaron los pueblos del sur de la Grancolombia, por sus ingentes aportes a las luchas libertarias.  En todo caso se conserva la esencia de esa institución, que en alguna parte del decreto del Libertador, expresa que se haga esta feria coincidiendo con la peregrinación religiosa de El Cisne a Loja.  De propósito: ¿cuáles son las exenciones tributarias que se dan para propiciar la asistencia del gran comercio nacional y de los países vecinos a la feria de Loja?

De lo que se sabe, muchas familias ante el elevado costo de productos y elementos necesarios para el hogar, el trabajo, el nuevo año académico, en fin, prefieren costear el viaje hacia la ciudad de Cuenca y hacer sus adquisiciones en los grandes almacenes de esa ciudad, pues encuentran visible la diferencia de costos con los similares de nuestra ciudad.

En estas fiestas el predominio del comercio en todos los aspectos es la tónica, en todos los sitios se trata de obtener réditos económicos, un estímulo a la disminución de la actividad en los meses anteriores, para enfrentar lo que resta del año y hasta los primeros meses del nuevo periodo.

Retomando la anticipación de la tradicional fecha de la feria de Loja, la comunidad aspira que esos cambios nos traigan impulso en la generación de recursos, el intercambio comercial, la presencia de una gran oferta de productos y servicios debe propiciar el bienestar colectivo, puesto que si han cambiado las fechas para el inicio de las actividades escolares y estudiantiles, es menester coincidir con esos cambios para beneficio de todos. ¿Estamos de acuerdo?

jueves, 6 de agosto de 2015

PARA DAR SERVICIO Y SERVIR



Segundo Fidel Maldonado Tapia

Las celebraciones cívicas nacionales tienen un contenido y trascendencia histórica ejemplar para todas las generaciones, pues elevan el espíritu de patria, convalidan la ciudadanía y la libertad, que costó muchos sacrificios y no pocas vidas, que en los afanes de los ideales nos han legado un cúmulo de enseñanzas, que debemos recordar con gran respeto y admiración.

La evocación del 2 de agosto de 1810, que tiñó de sangre las mazmorras del Cuartel Real de Lima en la Audiencia de Quito, que de acuerdo con las diferentes versiones, unas más otras menos, fueron alrededor de 300 los sacrificados, mujeres y hombres, que por sus ideales de libertad, bienestar y progreso, entregaron sus vidas, lo que en la historia le confirió a Quito el blasón de “Luz de América”.

En el transcurrir de los tiempos, diversas son las luchas emprendidas por la humanidad y el Ecuador por el reconocimiento de derechos, por pensar diferente a las circunstancias del poder en su momento, porque somos personas y como tales merecemos las consideraciones que el respeto humano a consagrado en diversas declaraciones y normas supra nacionales, estatales y locales.

No siempre han desembocado en eventos cruentos y de sacrificio de vidas, pero que aunque no se derrame literalmente su sangre, en el imaginario de los colectivos, es como si lo fuera.  Así tenemos la negación de derechos, el irrespeto a las normas legales y de convivencia armónica, aspiraciones y desajustes relacionados con el diario vivir, la falta de tino y tolerancia de quienes, transitoriamente, están al frente de la institucionalidad, conllevan la rebeldía de quienes lo sufren, muchos ante la incuria de las leyes y sus operadores.

El posicionamiento estatal e institucional, por sentido común, obedece a los intereses de todos o de las mayorías, por decir lo menos, sin embargo, se deben abrir los espacios para el intercambio de opiniones y sopesar el sentir de las diversas comunidades e individualidades, según sea el caso, para llevar hacia adelante la vida social, cotidiana de sus componentes, el decir popular de que en las opiniones siempre se debe tomar en cuenta, la opinión del otro, la propia del interfecto y la verdadera, nos lleva a propiciar el escuchar y ser escuchados.

La altura y condiciones para los parlamentos institución-comunidad, deberían ser los básicos componentes para avanzar en la construcción de los anhelos de todos.   En la vida todo pasa, es decir es transitorio, lo que hoy nos resulta lesivo puede y debe ser para el mañana, trastocado en beneficio.  Es entonces, que debe ponerse de manifiesto la visión para administrar, evitando los perjuicios y prejuicios para que se adopten las disposiciones y acciones que agravien lo menos posible. Que sean para dar servicio y servir.