FALLECIÓ EL AUTOR, CALÍGRAFO, ARTESANO, POETA, SERVIDOR PÚBLICO HONESTO, LEAL AMIGO Y FRATERNO LOJANO,
SR. LIC. AURIO BOLÍVAR MALDONADO SAAVEDRA
Loja, 06 de marzo de 2012.
Cuando el 29 de septiembre de 1930, se manifestaba en la apacible ciudad de Loja, la extremeña ciudad ecuatoriana, nació Aurio Bolívar Maldonado Saavedra, hijo de: Luis Darío Maldonado Ramón, lojano, instrumentista de la trompeta en la Banda de Músicos de la actual Brigada de Infantería No. 7 “Loja”; y, de Rosa Filomena Saavedra, ama de casa proveniente de la ciudad de Zumba de la provincia de Zamora Chinchipe. De esta unión, tiene a su hermana Licda. Martha Lucrecia Maldonado Saavedra.
Sus estudios primarios los realizó en la Escuela de los Hermanos Cristianos, los secundarios en el Colegio La Dolorosa y los Superiores en la Escuela de Derecho Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Nacional de Loja, de la cual egresó y obtuvo el grado y título de Licenciado en Ciencias Sociales, Políticas y Económicas. Desde 1975, fue profesionalizado como Periodista, por el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes de ese entonces, en unión de otros lojanos, en mérito a los aportes que habían entregado hasta esos años al participar de la producción periodística en medios impresos y electrónicos.
Contrajo matrimonio con la señora Profesora Digna María Tapia Paz, hija del maestro artesano Ebanista, Segundo Tapia Rivera, lojano; y de Carmen Luz Paz, cariamanguense, ama de casa. De su unión sobreviven siete hijos: Carlos Bolívar, ex empleado bancario y actual motivador de rehabilitación; el Doctor en Jurisprudencia, Abogado de los Tribunales y Licenciado en Ciencias de la Comunicación Social, Segundo Fidel; la Licenciada en Trabajo Social, Aurea Patricia; el Doctor en Jurisprudencia y Abogado de los Tribunales, Luis Fabián; John Paul, Comerciante minorista; Miguel Eduardo, Maestro en Educación Musical y Canto, residente en Pamplona-España; y, Nelson Alberto, funcionario público, residente en la ciudad de Quito. Tiene 25 nietos y 16 bisnietos.
Desde temprana edad se manifestaron en él las cualidades que le harían inclinarse por las artes y las letras, a los 15 años fue propuesto por el grupo de señoritas que administraban la radio “Coro Santa Cecilia” de esta ciudad para que dirija el programa “Valores Ecuatorianos”, de profundo contenido nacional, cívico y patriótico que se transmitió todos los días domingos, inicialmente de 09h00 a 11h00 y posteriormente por la acogida que tuviera se extendió de 09h00 a 14h00, con alta producción literaria e histórica y enriquecido con la música nacional, la poesía de los autores lojanos y nacionales, fortaleciendo la soberanía y dignidad ecuatorianos. Este programa duró alrededor de cuatro años.
En su formación universitaria, el espíritu inquieto, lleno de vigor y rebeldía por alcanzar mejores días para la colectividad, se involucró en la redacción del periódico “Baluarte Juvenil”, semanario de orientación político-literaria, compartiendo con sus amigos aficionados al periodismo: Dr. Max Puertas Alarcón y Dr. Máximo Salinas, entre otros.
Colaboró con Radio Nacional “PROGRESO”, propiedad del ya desaparecido radiodifusor Sr. Efraín Herrera Guerrero, con quien llegó a trabar cercana amistad y en la que realizó varias programaciones como el programa “Lojano Ausente”; radio periódico “Dimensión”; entre otros. Fue también colaborador de Radio LOJA, propiedad del Clero lojano; Radio ONDAS CASTELLANAS, propiedad del Lic. Gonzalo Eguiguren.
Fue un activista en la vida política local y nacional, llegando a formar varias organizaciones obrero-populares, como la Coalición Libre Obrera y Popular –CLOP-, así como fundó el semanario EL VELASQUISTA, como apoyo al que fuera cinco veces Presidente de la República, Dr. José María Velasco Ibarra. Con el retorno a la vida democrática de nuestro país en 1978, fue candidato a la Tercera Diputación Provincial por Loja, con el Partido Nacional Velasquista. Los imponderables de la política con las incomprensiones que ella trae, hicieron que muchas veces se auto exiliara de las actividades públicas con gestos de valor y dignidad, en medio de las perfectibilidades que en todo ser humano pueden hacerse presentes.
Dentro de las actividades públicas, se desempeñó como Secretario de Nóminas y Jefe de Trabajos del Consejo Provincial de Loja; Secretario de la Tesorería Municipal de Loja, Secretario de la Unidad Ejecutora del Canal de Riego de Macará de la Junta de Recuperación Económica de Loja y Zamora Chinchipe, Promotor de la Pequeña Industria de Loja, dependencia del Ministerio de Previsión Social y Trabajo; Comisario Provincial de Salud de Loja, durante cuyo ejercicio editó la revista LA SALUD, órgano oficial de la Jefatura Provincial de Salud de Loja, en la que se logró contar con el Himno de la Jefatura Provincial de Salud de Loja, composición musical del Mtro. Edgar Augusto Palacios y letra del poeta, Ing. Alfredo Jaramillo Andrade. Otra revista que en bien de Loja, promoviendo su cultura y atención para sus necesidades, fue co-editor, es la Revista “CIUDAD DE LOJA”. Fue Subdirector de RADIO NACIONAL DEL ECUADOR, estación filial de Loja.
A lo largo de su vida, en ejercicio de sus actividades cotidianas, fue columnista y articulista de los medios impresos de Loja, como: Diario LA OPINION DEL SUR, el cual llegó a dirigir; el semanario EL VOLANTE; Diario LA FRONTERA; Diario EL MUNDO, Diario EL SIGLO. En los últimos años fue Director del Diario LIBERTAD. En estos medios perduró sus aportes en la columna de opinión-orientación "La voz que no olvidaremos".
Fue co-propietario de Radio FANTASIA ESTEREO 94.3 FM, la primera estación que en frecuencia modulada tuviera Loja y que se iniciara con el aporte de Efraín Avendaño, en la cual con sus hijos y familiares, prodigó a Loja 25 años de intensa actividad periodística radiodifusora. Actualmente la emisora tiene otros propietarios y se denomina Radio Ondas de Esperanza.
En el ámbito artístico fue ejecutante del requinto e integró varias agrupaciones en su juventud. Siempre se puso de manifiesto en él, su apego a la música nacional ecuatoriana, así como fue creador de muchas obras de artesanía utilitaria y decorativa, participando con destacados stands en las Ferias Septembrinas, obteniendo el reconocimiento en los primeros lugares por su labor. Es uno de los primeros calígrafos que tuvo Loja, que preocupado por dar más calidad a sus trabajos, los llegó a realizar en pergamino auténtico, de piel de cordero, así como innovaciones y motivos conforme a la naturaleza y finalidad de los trabajos que se le confiaron, muchas de sus obras están fuera de Loja, en hogares nacionales e internacionales. Es el prioste fundador de la fiesta de San Miguel Arcángel en el Santuario Eucarístico de San Sebastián de la ciudad de Loja.
En las actividades gremiales y de organización social, es miembro de la Unión Nacional de Periodistas, integrando varios directorios en diferentes dignidades y años; siendo el mentalizador de la creación de la Carrera de Periodismo con el apoyo del fallecido Lic. Vicente Bastidas Reinoso, a quien en un viaje hacia la ciudad de Quito para realizar gestiones con este propósito, le alcanzara la muerte y con ella, la postergación del anhelo de tener la Carrera Profesional Universitaria de Periodismo. Fue uno de los pioneros del Colegio de Periodistas de Loja.
De su inspiración poética, a la muerte del connotado intérprete de la música nacional, Luis Alberto “El Potolo” Valencia, escribió la creación literaria “Fa. Do, Sol de Luis Alberto Valencia”, que le valiera el reconocimiento y primer premio en un concurso local de poesía, promovido por Radio “Centinela del Sur”. Publicó el folleto con sus creaciones poéticas “Cóndores Dormidos”.
Sus actividades en bien de la música nacional, además de la difusión radial, se traducen en la creación en Loja, con otros ameritados artistas y compositores, de la Sociedad de Artistas y Compositores Ecuatorianos –SAYCE- filial de Loja, allá por los años 1978, teniendo a su haber varias letras de temas de música ecuatoriana, a las que pusieran partitura musical los Maestros: Luis Guayas, Octavio Díaz, entre otros. Así se recuerdan: “Cuenca de Porcelana”, “Digna”, “Morenita Macareña”, “Lojano ausente”.
Esta es una ligera semblanza de quien en vida fue Sr. Lic. Aurio Bolívar Maldonado Saavedra, persona que dedicó su vida al servicio de Loja, al periodismo, a la difusión de los valores patrióticos, cívicos y de dignidad ecuatorianos; al fomento de las artes y amor a la música nacional; una muestra de las realidades que encierran personajes que se resisten al olvido y que en la ladera augusta de la senectud, en el tercer milenio, era abril del año 2011, por la bondad y amplio corazón de la Sociedad de Autores y Compositores Ecuatorianos, filial de Loja, por iniciativa de la Vocal Nacional del gremio Sra. Livia Calle, fue galardonado y condecorado en acto público, realizado en el Salón Social de la Cooperativa Educadores de Loja Ltda.
Sus pasos espirituales todavía caminan por las calles y plazas solariegas de la ciudad de Loja, evocando momentos, recordando circunstancias, reflexionando vivencias y compartiendo experiencias.
Esta fue la vida del artista, calígrafo, artesano, poeta, servidor público, leal amigo y fraterno lojano, Sr. Licdo. Aurio Bolívar Maldonado Saavedra, quien desde el 6 de marzo del 2012, descansa eternamente, ha muerto físicamente pero lo recordaremos sempiternamente en nuestros corazones.
Les participamos una muestra de su vena poetica, publicada en “CONDORES DORMIDOS” 1978
AURIO BOLIVAR MALDONADO SAAVEDRA
LOJA – ECUADOR
LUIS DARIO MALDONADO RAMON
Nacio en Loja el 25 de octubre 1907
Falleció en Loja 28- VI – 1 978
En la infancia de la mañana
fuiste nácar del tiempo
cristalización de anhelos,
conquistados de símbolos,
peregrino de la patria,
la felicidad y la vida
TUS HIJOS
En el primer aniversario de la partida final
Loja, junio 28 de 1979
LONTANANZA
La tarde principia a oscurecer
y en su horizonte,
flamean perdones escarlatas
entonando con sol en sus montañas
un himno de despedida,
quimera, de mi sangre
Era noviembre de 1977
el que decretaba luto en mi Osamenta
el cielo encapotado
presagia el shock de la tormenta
a la hora que Loja festejaba su epopeya
con las guitarras, clarines y bongós
No es el azul de mis ciudades
cantando sus verdes esperanzas
cuando en campos agrestes del Oriente
mi Padre encendía la cultura
entre seres de verde lejanía
empapado con lagrimas de lluvia
encerrado cual proscripto pasajero
en Limón Indanza nuestro suelo
cumpliendo con nobleza su deber.
Son las notas, como ruidos
que el crujir de la hojarasca
lo embelesan a la orilla de los ríos
y en la mitad de la maleza.
Canto de noche.
canto, canto con la maraña,
desdibujando paisajes
En esta hora de noviembre
cuando Loja celebra su día
cuando vienes y te alejas
Era noviembre de 1977
el que decretaba luto a mi Osamenta.
Nuevamente tu cansancio
con mística en el pecho
vuelve a llamar
Con ambición desmedida
y con aire de nostalgia
arrebolando los cabellos blanquecinos
de tu cabeza que en otros sensitiva
daba ejemplo como el cisne
en las grandes tempestades
y en la angustia de agonías y de males.
Irguiéndote con esperanzas
cual ramo de blancas rosas
en el Altar de Dios Infinito
brindabas perfumes y gracias
con arpegios y armonías
con melodías de escalas
con musicalidad rebelde.
Y en esta hora de noviembre
al pié del lecho, sollozaba
este lirio obscuro deshojado
Y en la mitad de la maleza
cual rocío de plantas orientales
rodaban gruesas lagrimas internas
escribiendo partituras que conformen
en la vida, que me diste Luis Darío
Cuando miro tu retrato
en el álbum de mis penas
siento latir tu sangre
de infante y caballero,
noble viejo ecuatoriano
de las tierras insalubres
donde inhóspitos mosquitos
con sadismo de silvestres
taladraban cuerpo de hombre
y carcomían tu existencia.
¡LEVANTATE Y ANDA!
No era llegada la hora
Luis Darío, Luis Darío
así lo dijo el Señor:
¡levántate y vuelve a caminar!
como lo hiciste en la guerra
bravía de los cuatro días,
cuando en rios de sangre hermana
las calle se convirtieron
de Quito la “Luz de América”.
Sobre el tronco desvencijado
vestido de cortesano
con perfume de eucalipto
y color de partisano,
sentados en la playa zamorana,
comentabas ¡cómo las balas
saludaban vuestras cabezas!
y como el clarín con tus labios
imprimía el ritmo de gloria
presagiando con cadencia
el fin de la tempestad
aunque al momento la historia
no olvide la mortalidad
El cinturón de la muerte
no pudo apretar tu juventud
le ganabas noble batalla
por andenes de la capital
A tu hermano Pedro Alberto
no lo podías encontrar
los muertos eran tantos
y no avanzabas a caminar:
virando a los cadáveres empapados
en disciplina y de mal olor
creías que alguno de ellos
te podría abrazar.
El rifle a la espada cansada
y la trompeta que los aires hendió
preñados de orfandad
fieles a la cita militar
montaban guardia con soledad.
Al fondo del macabro teatro
y entre líneas vesperales
del cielo ensangrentado;
va emergiendo una silueta
que caminaba y se agiganta
a cada paso mundano….
Las dos sombras en la noche
levantan los brazos de roble
y mutuamente musitan:
¡Luis Darío!.........!Pedro Alberto!...
Se encontraban los hermanos
al final de la batalla.
A PABLO NERUDA
Pablo Neruda
fuente cristalina de verdad
emergiste enarbolando el Centro de tu Gloria,
saboreando amarga cuna de infortunio
con broqueles de dolor.
¡Emulo de libertad,
ciclón de la democracias,
excelsitud de culturas
en la parcela popular suramericana!
Tu verso es la cadena
de hojas verdes de la paz.
Pluma inagotable
de Chile ensangrentado
pasajero perseguido……
pasajero desterrado
del velorio sin conciencia
Caballero del – Nobel Literario –
pregón de nuestras letras
Hispanoamericanas.
Pablo Neruda,
tu cabeza encanecida
es un reto a la nostalgia
combativa y sin esguinces
pro trabajo y libertad.
Cuando el canto de la noche
triste y sin estrellas
ascendía el Aconcagua
de la serena alcoba
marcabas con tu acento literario
el latir cansado y la angustia
del pueblo que no conoció riquezas.
Sacudiste a gobernantes desleales
metidos en capotes de liricas bonanzas
rompiendo viejos moldes
con presagios y cuartillas
con votos de esperanza
Esa era tu campiña
esa era tu parcela…….
“Porque de tantos cuerpos una vida invisible
se levanta. Madres, banderas, hijos
Un solo cuerpo vivo como la vida:
un rostro de ojos rotos vigila las tinieblas
con una espada llena de esperanzas terrestres”
Ese era tu canto en la garganta
de la cordillera donde nace el río
de hijos plateados,
metido en la sangre.
Y, así nace el grito del pueblo:
¡los ojos que aquí me miran
son los de Pablo Neruda!
Su carne latigueada y en pedazos
en su casa, en sus libros y en sus notas
fueron los manuscritos incendiados
por los parias, por las fieras
que en los siglos de locura y de barbarie
aprendieron como norma,
como ley, para extinguir la luz.
Con su conciencia intranquila
los gestores del salvajismo
vivirán un volcán no apagado,
recordando desde el averno
aquel crimen sin perdón.
Los ojos que aquí me miran
son los ojos de Pable Neruda,
clamando justicia a la Patria
clamando justicia al Mundo
y elevando como plegaria
la mística de su sino.
El auroral de sus glorias
despertará en las mañanas
se subira en las montañas
como mensaje de un campanario
que se acuesta despierto
en la tarde sin ocaso,
entre las grietas, los valles y las rocas
las aldeas, las ciudades y los hombres,
pregonando su ideal:
oración sempiterna de la PAZ
sempiterna oración.
Esa era tu campiña
esa era tu parcela…….
¡Patrias, Banderas, Himnos!
Los ojos que aquí me miran
son los de Pablo Neruda,
porque el pan, la leche y la carne
del vientre huyen como gacelas
perseguidas por don dinero
que no las alcanza…..
¡que no las alcanza!
Los ojos que aquí me miran
son los de Pablo Neruda,
porque el vestido se cae
y los huesos se chorrean
en catarata sin agua
del estomago vacío:
porque la barcaza se hunde
y don dinero no alcanza….
¡ya no alcanza!
Loja, noviembre 15 de 1973
FA, DO, SOL... DE LUIS ALBERTO VALENCIA
Los aires se huracanan…….
La naturaleza llora,
las aguas del mar se encrespan.
la guitarra ecuatorial gime,
solitaria y destemplada….
Luis Alberto Valencia,
se remontó a los cielos,
y su voz quedó suspendida,
como estrella, como ritmo
como nota musical
en silente pentagrama.
“Vasija de barro”,
vientre de tu querer….
tierra blanca española
metida en el barro del indio,
su voz se agigantó.
Música del aire enviada
de los cielos a la tierra,
sólo ella te recuerda.
Aquella mixtura de polvo
Con sonrisas y sin agravios
Encerrados en cíclope humano
Con mística de ensueño y del más allá,
Se elevó como el águila en los Andes
Y nos dijo adiós.
¿Te quedaste sólo
Sin que nadie te recuerde? ……
Cuando tuviste la clave
para hacernos reír y llorar
no la pudiste sostener
aquellas: fa, do, sol,
con las corcheas del pasillo y del pueblo
desparramadas al viento, sin son,
se confundieron para exprimir
las arterias cerebrales.
Extendiendo tus cortos brazos
A tu tierno árbol de pocos años,
Te arrimaste ……sin razón,
Y muy quedo a su oído musitaste.
¿Era acaso mensaje especial para tu esposa?
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